jueves, 13 de enero de 2011

Niebla

Ayer miré hacia mañana
y vi niebla.
Niebla fria, espesa y ciega
Que avanzaba. Que devoraba
y me hacía caer
y me hacía tiritar
En el frío que nace en el pecho
cuando se congela desde dentro.
Y tengo miedo. Tengo miedo.
Hace hoy años que lo sentí
ahora, igual, sigue en el mismo sitio
Temo a la niebla cegadora,
a la niebla movediza
La temo, porque detrás de ella no hay ya nada
Un desgarro, un alma solitaria y un vacío.
Temo a mi propia niebla.
Temo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario